REPRODUCCION ASISTIDA
INDUCCIÓN DE LA OVULACIÓN
Las disfunciones ovulatorias son una causa muy frecuente de esterilidad. En ausencia de otros factores, una correcta inducción de la ovulación restablece la fertilidad de la pareja.
Las candidatas a una inducción de la ovulación son aquellas mujeres anovuladoras. Pero también, las mujeres ovuladoras que presentan defectos en la fase lútea, las parejas con esterilidad sin causa aparente (ESCA) y las pacientes que van a ser sometidas a una inseminación intrauterina.
El objetivo de la inducción/estimulación de la ovulación va a ser mejorarles las chances de embarazo a partir del desarrollo de 1-3 folículos capaces de ser fertilizados.
INSEMINACIÓN INTRAUTERINA
La inseminación intrauterina (IIU) es una técnica de reproducción asistida de Baja Complejidad segura y ambulatoria.
Su objetivo es ayudar a que el ovulo y el espermatozoide se encuentren dentro del aparato reproductor femenino, mediante su capacidad natural, con la finalidad de lograr un embarazo.
El crecimiento folicular (necesario para que se produzca la ovulación) es seguido mediante monitoreo (ecografías endovaginales), pudiendo utilizar medicación tanto para mejorar la respuesta del ovario (estimulación), como así también, para aseguramos el momento de la ovulación (inducción).
El semen es previamente procesado con un medio de cultivo (capacitación) lo que permite mejorarlo; luego es colocado mediante una cánula o catéter dentro del útero el día que esperamos se produzca la ovulación.
Para la realización de esta técnica se requiere la integridad anatómica de por lo menos una trompa de Falopio y una buena concentración de espermatozoides móviles.
La técnica es sencilla se realiza con la paciente en posición ginecológica, muy similar a cuando se realiza un Papanicolaou.
¿Quién se beneficia con esta técnica?
- Mujeres que utilizarán banco de semen.
- Mujeres y/o parejas con alteraciones ovulatorias.
- Mujeres y/o parejas con antecedentes de patologías en el cuello uterino.
- Parejas en las cuales el hombre tiene algún tipo de disminución de la calidad seminal o ausencia la producción y/o liberación espermática.
- Parejas que no han logrado embarazo de forma natural.
- Parejas en las cuales el hombre sufre la portación de alguna alteración genética, y la IIU sea una opción.
¿Cuál es la eficacia?
Las técnicas de baja complejidad tienen menor eficacia comparadas con las técnicas de alta complejidad, ya que depende de muchos factores como la historia medica de la pareja, edad, reserva ovárica, calidad del semen, etc.
Históricamente la tasa de embarazo clínico por intento no supera el 17% cuando se usa semen homologo (de la pareja) y aumenta en los casos que se utiliza semen de donante, ya sea en parejas heterosexuales, del mismo sexo o mujeres solas; en los últimos dos casos probablemente se deba a que no tienen otras patologías.
Es frecuente en las Técnicas de Reproducción Humana (TRA), ver diferentes resultados publicados; cabe aclarar que muchas veces son publicados en base a tasas acumulativas (resultados tomando en cuenta 3 o más intentos).
¿Qué tiempo demanda?
A partir del comienzo del ciclo menstrual, tomará unos 10 a 12 días en lograrse la maduración de los folículos; en ese momento se indica la última medicación y dentro de las posteriores 36 horas se realiza la inseminación intrauterina.
FECUNDACIÓN IN VITRO (FIV)
La fertilización in vitro (FIV), es una técnica de alta complejidad, se requiere de un laboratorio con altos estándares de calidad para su realización; en ese ambiente muy cuidado se busca lograr que óvulos y espermatozoides fertilicen, facilitándole las condiciones para hacerlo.
Esta técnica está indicada cuando los espermatozoides están imposibilitados de fecundar los óvulos u ovocitos en su sitio natural, la trompa de Falopio.
El proceso consiste facilitar la fecundación fuera del cuerpo de la mujer, en el laboratorio, manteniendo óvulos y espermatozoides en una cápsula con medio de cultivo y bajo condiciones ambientales controladas.
Aunque la fertilización del óvulo por el espermatozoide se produce en un medio artificial (in vitro) el proceso de fertilización es totalmente natural, ya que el proceso consiste en colocar un promedio de 50000 espermatozoides alrededor del óvulo, siendo penetrado naturalmente por uno de ellos.
Así se forman los embriones, que se mantienen en cultivo en el laboratorio, entre 2 y 5 días y luego son transferidos a la cavidad uterina con el objeto de que continúen su división y desarrollo en el útero de la gestante.
Cabe destacar que puede no darse la fertilización, esto puede ocurrir en un bajo porcentaje, generalmente por compromiso en la calidad de los gametos. Otra situación que podría ocurrir es el hecho de que, a pesar de haber fertilizado, en los días subsiguientes los embriones no alcancen la calidad para ser transferidos al útero de la gestante